¿Liquidez o inversión?

Cuando la inflación menoscaba el poder de compra de familias y empresas, en un entorno de tipos de interés reducidos, la obtención de rentabilidad por la tesorería implica asumir más riesgo a corto plazo. La inversión en I+D+I gana peso, así como la compra de activos inmobiliarios -el crecimiento en rehabilitación se ha disparado un 17%- y las adquisiciones de empresas.

Desde Capital Focus, aconsejamos invertir pues los tipos nominales están al 3% y la inflación subyacente al 5%. No hay que olvidar, que la inversión en circulante -clientes, stocks, equipo…- también es inversión y muchas veces la más rentable, aunque sea difícil calcular el ROI.